El árbol del pan o fruta de pan (Artocarpus altilis), es un árbol que alcanza de 10 a 15 m de altura, perteneciente a la familia de las Moráceas. Originario de Oceanía, se ha plantado y adaptado a todas las zonas habitadas tropicales, muy especialmente a las de américa del sur.  Tiene copa frondosa hojas grandes y alternas divididas en lóbulos puntiagudos, brillantes, ásperos, gruesos y con pequeños pelos en la cara inferior.
Sus flores son de color blanco amarillentas, presentes a partir del mes de noviembre y diciembre, encontrándose con frutos maduros desde febrero a marzo.
El fruto es grande, de hasta 3 kg de peso, de color verde y un olor característico, que es la parte comestible o “Pan”. Es rico en carbohidratos, algo pobre en proteínas, con una buena cantidad de fibra y poca grasa. La pulpa al igual que las semillas, se usan en diversas preparaciones ya sea: cocido, horneado, hervido y frito.
Es un alimento sano utilizado más que todo por la gente del campo, no solo por sus excelentes propiedades alimenticias para personas y animales, sino porque además es medicinal.
El látex que produce esta planta es un caustico moderado y se aplica sobre las verrugas y dureza de la piel. También se utiliza como remedio para las hernias umbilicales de los niños.
Por otro lado, su uso medicinal es muy amplio ya que como remedio casero es utilizado para el asma, esto haciendo una infusión de las hojas y tomándose una taza durante tres días en ayunas.

Tradicionalmente, El árbol del pan ha sido muy utilizado para aliviar, entre otras, las siguientes dolencias: Antidiarreico, Conjuntivitis, Diabetes, Dolor de oído, Extracción de espinas, Tensión arterial

Fuente:

Dr. José Luis Berdonces - Gran Enciclopedia de las Plantas Medicinales
Stephan G. Beck, Emilia Garcia E., Timoty J. Killeen - Guía de árboles de Bolivia
Lexus editores Manual Agropecuario (Biblioteca de campo)